Second Home Peru

La ubicación de este hotel es lo que hace que valga la pena el valor en dólares.En una ciudad ocupada como Lima, te sientes apartado y seguro en esta zona tranquila.Al mismo tiempo, la ubicación está lo suficientemente cerca de varias comodidades e incluye en la mayoría de las opciones de recolección de gira.Elegimos caminar hacia el mercado un par de cuadras hacia abajo y abastecer nuestro refrigerador con agua y bocadillos.El desayuno es el mismo cada día, es bueno, pero si desea una variación, hay muchos restaurantes y cafeterías en la misma calle.La playa es un poco una caminata, pero vale la pena.El hotel está ubicado cerca de algunos lugares maravillosos como el puente de los suspiros, por lo que caminar y explorar siempre fue agradable.Habíamos leído comentarios diciendo que la piscina está fría, y lo es, pero con días cerca de 30 ° C, fue refrescante y genial.Pasamos los últimos dos días de nuestro viaje descansando junto a la piscina y nadando.

La sala de apartamentos no venía con AC, sino la Seaview con sala de balcón.Por otro lado, el apartamento vino con una nevera y la sala Seaview no.Otra cosa a tener en cuenta con la sala de apartamentos es que aquí hay solo cortinas en el dormitorio.Desde la zona de asientos de la vista oceánica, puede mirar directamente al espacio habitable del apartamento.Descubrí que en su mayoría nos quedamos en nuestras habitaciones y no utilizamos el hermoso espacio, ya que te sientes un poco como pescado en un tazón.Nos alojamos en varios hoteles, a través de grupos de gira, y notamos que otros hoteles negociarían los precios del taxi cuando llamaron, pero el segundo hogar no.Llamarán a un taxi para usted, pero la porción de negociación es todo sobre usted.Además, no todos los empleados hablan inglés, lo cual está bien, sino que solo tenga en cuenta y haga que Google Translate en Standby.Por último, no hay asientos en la piscina, así que si tienes la capacidad de empacar una silla plegable, que vimos a un chico traer, ¡hazlo!

Durante nuestra estadía en Perú, tuvimos el placer de experimentar el encanto único del segundo hogar Perú, la mansión del artista peruano Victor Delfín.Desde el momento en que atravesamos la puerta principal, nos recibió una atmósfera de elegancia y estilo artístico.La sala de entrada nos recibió con su grandeza, adornada con grandes espejos de estilo Versalles que agregaron un toque de opulencia.Esta gran entrada nos llevó a un comedor con un techo cofre, exudando una sensación de refinamiento y sofisticación.Al otro lado del primer piso, descubrimos una sala de salón que brillaba con vidrieras, mostrando una impresionante colección de cerámica antigua en los gabinetes de curiosidad.El punto focal del salón era un exquisito piano incrustado, que se suma al ambiente de la inspiración artística que impregnaba el espacio.A lo largo de nuestra estancia, nos cautivó la combinación perfecta de historia, arte y lujo de la mansión.

ninguno

Qué lugar tan maravilloso para quedarse y, como otros han dicho, qué privilegio tan maravilloso poder permanecer en la casa de Victor Delfin con vistas al mar.La ubicación es excelente, justo en el acantilado y los medidores de algunos restaurantes muy buenos (comimos en la excelente awicha).Nuestro apartamento era espacioso, artístico y nos encantaron los balcones con vistas al mar.La cama era cómoda y la brisa a través de las ventanas se enfriaba y era agradable.El desayuno era simple pero listo en el encantador jardín, que fue genial.El personal fue muy acogedor y servicial.

Nada estaba mal, realmente nos gustó todo sobre nuestra corta estadía.

Fue maravilloso estar en la casa de Victor Delfin.Su arte está absolutamente en todas partes.Fue un placer estar inmerso en una creatividad tan talentosa y prolífica.La casa tiene un personaje maravilloso y me encantó poder ver y escuchar el mar desde mi cómoda cama en mi habitación.El personal es amable y servicial.Hice mi lavado allí.El desayuno se sirvió en la terraza en el jardín que me gustó.La casa está en muchos niveles y es muy hermosa y peculiar.La piscina es excelente para refrescarse y las sillas colgantes están en algún lugar para relajarse en el jardín junto al mar.

No puedo pensar en nada.

La propiedad era como una segunda casa.Tranquilo y relajado con muchos buenos restaurantes cerca.Mercados y tiendas también.El personal estaba relajado y atento y disfrutamos hablando con ellos sobre el área y la vida en Lima.Las vistas desde el hotel fueron increíbles.Era una galería de arte dentro y alrededor de la propiedad, por lo que era difícil irse y ver otras cosas durante el día.Estamos muy contentos de habernos quedado aquí en nuestros últimos días en Perú, para cerrar nuestro viaje con algunos recuerdos muy especiales.¡Definitivamente recomendaríamos esta propiedad!

¡La ubicación, y la vista del mar era increíble!

El desayuno es pobre (solo pan y huevos) Caminé hasta la piscina, de manera repentina, 2 dudas vinieron a mí para que me dijeran no en un wat muy agradable "Esta es un área privada, no te quedes aquí", por difícil saberlo como eran Ningún signo, y cuando nos registramos, nadie nos explicó nada sobre el hotel, no estaba seguro de si había dueños, pero realmente no nos sentimos bienvenidos por nadie (solo la persona en la recepción nos ayudó con nuestras solicitudes, muy helfpfull)

La ubicación era excelente.La calle en la que está es un callejón sin salida y la propiedad es el último edificio, por lo que el bloque es súper tranquilo.Camina un par de cuadras y hay mucha actividad.Toda la propiedad es increíble y es el patrimonio de un artista famoso.¡Las puestas de sol son perfectas y realmente se siente como un segundo hogar!

Todavía no tenían aire acondicionado.Dijeron que pronto se instalaría.Se calentó, pero también fue agradable dormir con las ventanas abiertas y escuchar el océano.

La ubicación cerca de los buenos restaurantes y en un callejón sin salida era agradable.El arte era interesante, la vista era encantadora.Los anfitriones fueron amables, y el caballero en el escritorio fue servicial y llamó a mi compañía de turismo para mí, lo cual fue apreciado.

Luché para cerrar las persianas, y no pude cerrar las ventanas.No había estación de café o té, y el desayuno era bastante limitado.Era bastante costoso teniendo en cuenta las instalaciones ofrecidas.

Wow, quedarse aquí, se sintió como golpear el premio gordo.Vistas y brisas del océano, edificio histórico, y no es solo un lugar "con arte", es la antigua casa y el estudio actual del mejor artista del siglo XX de Perú.Esto es subsistado en el sitio web.En el corazón de Barranco con galerías, parques y cafeterías en abundancia, todo dentro de los bloques.Conocimos a Delfin en su notable estudio.

¡Una propiedad tan encantadora!Uno de los lugares más hermosos en los que nos hemos alojado.Realmente sentí que nos quedamos en el estudio de arte privado/ en casa llena de arte y amor.El desayuno fue excelente, y pudimos recorrer los terrenos libremente.El personal fue muy útil.

No A/C, pero había fanáticos y nos acostamos con las ventanas abiertas, así que no fue un problema verdadero.

Hermosa ubicación justo en un acantilado con vistas al océano con impresionantes vistas.Para colmo está al final de una calle muy bonita con varios buenos restaurantes y bares.La piscina era excelente y también el balcón de nuestra habitación (1)

No es un disgusto, pero la carretera causa algo de ruido: los tapones para los oídos son una buena idea si en las habitaciones 1-3

Este hotel Boutique Family Run es el mejor en el que me he alojado.La ubicación era perfecta y segura para comer o caminar.Mi habitación era Ocean View y era extremadamente cómoda.El hotel y los terrenos reales eran muy interesantes que el personal era cariñoso y hizo todo lo posible para asegurarse de que mi estadía fuera perfecta.

Nada

La ubicación del hotel, cerca de los mejores restaurantes del sector, la gran y señorial casa en la que funciona, y el personal. Valoramos mucho contar con servicio de traslado de confianza, con don Carlos y don Ángel.

Todo muy bien. Por decir algo, la cama matrimonial era pequeña (pero cómoda) y la falta de frigo bar en la habitación.

Fue un honor quedarse en la casa de Victor Delfin.Apreciamos su trabajo.La casa respira historia e historias.Buena cama, excelente desayuno, buen bar.¡Increíble vista sobre el Pacífico!

Las cama solar en la piscina podrían tener mucho sentido.Y todos tras nosotros disfrutarán de AC en las habitaciones

La ubicación, la casa y la vista.

Desayuno.Tengo la misma comida todos los días.Poco seleccionado, refleje el huevo con tocino o huevos revueltos.Lo mismo (fruta, mermelada, pan, jugo y café).No hay yogurt, cereal, queso, carnes, etc. No aire acondicionado, solo un ventilador de pie.

La vista más hermosa, la habitación y el personal más amable.La vista es espectacular y el arte es increíble.Al final de la calle de muchos deliciosos bares y restaurantes.El segundo hogar es la perfección.

La casa es vieja pero bien mantenida y, en general, es absolutamente increíble, básicamente, te quedas en una galería de arte y el hogar de artistas.¡Ciertamente una experiencia única que nos encantó!

Las vistas y la atención

El precio se pasa un poco, cobran como si estuviera alojándose uno en el centro de Madrid. Hay ciudades europeas que cobran menos. Aunque igualmente me pareció hermoso el lugar

Prachtig oud pand, midden in barranco. Aardig personeel, goede service. Prima ontbijt en in tegenstelling tot wat er in andere reviews staat vonden wij dit de lekkerste broodjes in Peru tot nu toe?

Todo.Los terrenos y las instalaciones de arte eran absolutamente hermosas.El personal era muy servicial.

Alguna variedad de opciones de desayuno sería buena, ya que nos quedamos varios días.

El encanto de toda la propiedad, la antigua casa del artista Victor Delfin, con una visión fantástica del Pacífico, un oasis en la ruidosa Lima.

El piano no es una pena;)

Ubicación

Mismo desayuno todos los días. Tiene poca variedad y la pieza que me dieron no tenía clóset para guardar ropa. No reponian tampoco el papel higiénico.

Vista y ubicación Gran café del simple pero muy agradable donde se sirve

Habitación extremadamente caliente y de aire acondicionado

Un lugar muy especial para alojarse en el que nos encantaría volver un día.Increíbles vistas al mar e interiores increíbles.

Nada.

¡Las vistas y el arte!La habitación mirando el océano y los jardines.Buena ubicación

La cama era un poco difícil para nosotros.

Sereno y único.Nunca he estado en un hotel boutique que ofreciera tantas comodidades y tan bien equipado.

Puntos de vista

No hay suficientes jabones en el baño y el desayuno son muy básicos, pero sabrosos.

Instalaciones gloriosas: disfruté viendo la puesta de sol desde el patio con vistas al Seacoast

La vista y el arte.Conocimos al hombre que hizo todo el arte.Es un lugar especial.

La ubicación y la vista fueron excepcionales. Breakfast estaba delicioso.

Ubicación de la herramienta con museo integrado por Victor Delfin.

Casa, muebles, obras de arte, ubicación, ubicación, ubicación!

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Habitaciones superiores, excelente vista.Desayuno en la terraza.

Hermoso hotel único: hermosas vistas y excelente personal

Ver, ubicación, personal, instalación

nada

Este lugar es simplemente espectacular.